Las «lesiones deportivas» son lesiones que ocurren durante la práctica de un deporte o durante el ejercicio físico. Algunas ocurren accidentalmente. Otras pueden ser el resultado de malas prácticas de entrenamiento o del uso inadecuado del equipo de entrenamiento. Algunas personas se lastiman cuando no están en buena condición física. En ciertos casos, las lesiones se deben a la falta o escasez de ejercicios de calentamiento o estiramiento antes de jugar o hacer ejercicio. Las lesiones deportivas más comunes son:
- Esguinces o roturas de ligamentos.
- Distensiones capsuloligamentosas
- Roturas y lesiones fibrilares y musculares
- Entesopatías. Periostitis.
- Fracturas
- Luxaciones
Lesiones agudas y crónicas
Existen dos tipos de lesiones deportivas: agudas y crónicas. Las lesiones agudas ocurren repentinamente mientras se está jugando o haciendo ejercicio.
Las lesiones agudas más frecuentes incluyen esguinces de tobillo, distensiones en la espalda y fracturas en las manos.
Los síntomas de una lesión aguda incluyen:
- Un dolor intenso repentino
- Hinchazón
- No poder apoyarse en una pierna, rodilla, tobillo o pie
- Un brazo, codo, muñeca, mano o dedo que está muy dolorido
- Dificultades en el movimiento normal de una articulación
- Extrema debilidad en una pierna o un brazo
- Un hueso o una articulación que están visiblemente fuera de su sitio.
Las lesiones crónicas ocurren después de practicar un deporte o hacer ejercicio por un largo tiempo.
Los síntomas de una lesión crónica suelen incluir:
- Dolor mientras está jugando
- Dolor mientras está haciendo ejercicio
- Dolor leve incluso en reposo
- Hinchazón.
Actitud ante una lesión deportiva
Nunca trate de “aguantar” el dolor de una lesión deportiva. Deje de jugar o hacer ejercicio cuando sienta el dolor. Continuar solo puede empeorar la lesión.
Consulte con un especialista o vaya a un centro hospitalario cuando
- La lesión causa dolor severo, hinchazón o adormecimiento
- Usted no puede sostener ningún peso en el área lesionada
- Una lesión previa le duele
- Una lesión previa se hincha
- La articulación no la percibe como normal o la nota inestable.
Si usted no tiene ninguno de estos síntomas, podría tratar la lesión en su casa sin peligro. Si el dolor u otros síntomas empeoran, debe consular con el especialista.
Recuerde el método RICE (Hielo, Compresión, Elevación y Reposo) para aliviar el dolor, reducir la hinchazón y acelerar la recuperación.
Siga estos cuatro pasos tan pronto ocurra la lesión y continúe haciéndolo al menos por 48 horas.
- Hielo. Ponga una compresa de hielo en el área lesionada por 20 minutos, de cuatro a ocho veces al día. Para esto, puede usar una compresa fría o una bolsa de hielo. También, puede usar una bolsa plástica llena de hielo molido y envuelta en una toalla. Quítese el hielo después de 20 minutos para evitar una quemadura de frío.
- Compresión. Distribuya igual presión (compresión) sobre el área lesionada para ayudar a reducir la hinchazón. Puede usar un vendaje elástico, una bota especial, un yeso o un entablillado.
- Elevación. Para ayudar a reducir la hinchazón, ponga el área lesionada sobre una almohada, y asegúrese de que quede a un nivel más alto que su corazón.
- Reposo. Reduzca sus actividades regulares. Si se ha lesionado el pie, el tobillo o la rodilla, no se apoye en esa pierna. Ayúdese con una muleta. Si el pie o tobillo derecho está lesionado, use la muleta en el lado izquierdo. Si el pie o tobillo izquierdo es el que está lesionado, entonces use la muleta en el lado derecho.
Tratamiento de la lesión deportiva
Siempre iniciando el método RICE previamente.
Agentes antiinflamatorios no esteroideos (AINE)
Su médico le sugerirá que tome uno de los agentes antiinflamatorios no esteroideos (AINE) como es la aspirina, el ibuprofeno, ketoprofeno o naproxeno. Estos medicamentos reducen la hinchazón y el dolor, y puede comprarlos en la farmacia. Otro medicamento común es el acetaminofeno. Este puede aliviar el dolor, pero no reducirá la hinchazón.
Inmovilización
La inmovilización es un tratamiento común para las lesiones deportivas. Esta ayuda a mantener el área lesionada sin movimiento y previene mayor daño.
Cirugía
En algunos casos, la cirugía es necesaria para corregir las lesiones deportivas. La cirugía puede corregir tendones y ligamentos desgarrados o colocar los huesos quebrados en posición correcta. La mayoría de las lesiones no necesitan cirugía.
Rehabilitación (Ejercicio progresivo)
La rehabilitación es una parte importante del tratamiento. Esta incluye ejercicios que paso a paso ayudan al área lesionada a volver a la normalidad. Ciertos movimientos del área lesionada ayudan a mejorarla. La rehabilitación deberá comenzar lo antes posible. Los ejercicios empiezan con una serie de delicados movimientos del área lesionada. La siguiente etapa corresponde al estiramiento. Después de un tiempo, se pueden añadir pesas para fortalecer el área lesionada.
Mientras la lesión se cura, se va formando una cicatriz en el tejido. Con el tiempo, la cicatriz se retrae. Al retraerse se contrae el tejido lesionado. Cuando esto ocurre, el área lesionada se vuelve dura o rígida. Este es el momento en el que usted corre un mayor riesgo de lesionarse nuevamente en la mismo área.
Debe practicar estiramientos musculares todos los días y también como parte del calentamiento antes de jugar o hacer ejercicio.
No practique deportes hasta que esté seguro de poder estirar el área lesionada sin que haya dolor, hinchazón o rigidez. Cuando vuelva a jugar, comience lentamente. Aumente la actividad poco a poco hasta llegar a su condición normal.
Reposo
Aunque es bueno empezar a mover el área lesionada lo antes posible, también se debe reposar después de una lesión. Todas las lesiones necesitan tiempo para sanar; el descanso apropiado ayuda este proceso. Su especialista puede guiarlo para encontrar el equilibrio apropiado entre el descanso y la rehabilitación.
Otras terapias
Otras terapias comunes que ayudan con el proceso de sanar las lesiones deportivas incluyen el uso de: leves corrientes de electricidad (electroestimulación), compresas frías (crioterapia), compresas de calor (termoterapia), ondas sonoras (ultrasonido) y masaje.
Prevención de la lesión deportiva
Los siguientes consejos pueden ayudarle a evitar las lesiones deportivas:
- Cuando se agache, evite la hiperflexión de las rodillas.
- No tuerza las rodillas al estirarse. Mantenga los pies planos en la superficie lo más que pueda
- Cuando salte siempre doble las rodillas al aterrizar
- Los ejercicios de calentamiento son imprescindibles antes de practicar cualquier deporte
- Haga ejercicios de estiramiento antes de practicar deportes o hacer ejercicio.
- Haga ejercicios de enfriamiento después de practicar deportes o hacer ejercicio
- Use calzado de talla apropiada, que provea estabilidad y que absorba el impacto
Para adultos:
- No sea un “guerrero de fin de semana”. No trate de hacer en uno o dos días la actividad física que corresponde a una semana
- Aprenda correctamente el deporte que practica. Esto le ayudará a reducir el riesgo de lesiones por “uso excesivo”
- Use equipo protector caso de ser un deporte de impacto
- Conozca los límites de su cuerpo
- Aumente el nivel de ejercicio gradualmente
- Esfuércese por hacer ejercicios para todo el cuerpo, incluyendo ejercicios cardiovasculares, de fortalecimiento y de flexibilidad.
Para padres y entrenadores:
- Agrupe a los niños según el nivel de sus habilidades y el tamaño del cuerpo, no por la edad, especialmente cuando se trata de deportes de contacto
- Empareje al niño con el deporte que le guste. No obligue al niño a jugar un deporte que no le gusta o que no esté capacitado para hacer
- Busque programas deportivos que tengan entrenadores y profesionales certificados
- Asegúrese de que todos los niños pasen un examen físico antes de jugar un determinado deporte
- No permita jugar a un niño lesionado
- Lleve al niño a ver a un especialista, si es necesario o tiene dudas respecto a su forma física
- Provea un ambiente seguro para practicar deportes